Actualmente el puma en México, se desconoce cuántos ejemplares habitan en el país. Además de estar severamente amenazado por la cacería, invasión de su hábitat natural y la colocación de cebos con veneno para matarlo.  

HISTORIASMX. – Mediante la colocación de una cámara trampa de vida salvaje, un ganadero del municipio de Jiménez, Chihuahua, captó el momento en que un puma y su cría se acercaron a beber agua de un bebedero para ganado. 

Tras las fotografías captadas, se halló más evidencia, metros más adelante, por el lecho de un arroyo, en donde la puma y su cría dejaron plasmadas sus huellas en la fina arena del arroyo, trazando una ruta la cual se perdería metros más adelante. 

Dado que Jiménez, forma parte del gran Desierto Chihuahuense y el Bolsón de Mapimí, las cordilleras y la única sierra en la región sur del estado, Sierra el Diablo, son el hábitat de este felino, siendo avistado en distintas parte del municipio por los rancheros. 

Aunque el puma no tiene depredador potencial, actualmente su principal amenaza proviene del ser humano, así como de la invasión de su hábitat natural principalmente por la ganadería de agostadero.

Actualmente el principal depredador del puma es El Hombre. Quien lo asesina, por diversión y como trofeo de casería.

El ganadero que proporcionó las imágenes, denunció que desde hace un tiempo se ha estado poniendo veneno para matar a pumas. Asimismo, ante estas prácticas nocivas para la fauna y el ecosistema, se ha registrado la muerte coyotes y otros animales. 

“Es mejor no dar la ubicación, porque después se llena de cazadores, en las noches después van a andar lampreando, y pues eso está mal, ahorita para mí el puma me ha traído grandes beneficios” comentó O.M. 

La conservación del Puma, debe ser de prioridad nacional, al implementar leyes que penen su casería y atentados con cebos de veneno, con el objetivo de que esta especie amenazada por el hombre siga existiendo y no entre a la lista de animales extintos. 

Características del Puma.  

El puma, conocido científicamente como Puma concolor, es una de las criaturas más enigmáticas de América. Este majestuoso felino es el segundo más grande del continente, solo superado por el jaguar.  

Su amplia distribución abarca desde Canadá, pasando por Estados Unidos y México, hasta llegar a América Central, Chile y Argentina.  

En México, la historia de su distribución abarcaba todo el país en el pasado, pero hoy en día su presencia se ha visto drásticamente reducida debido a la destrucción de su hábitat. 

Puma vs. Jaguar: una competencia de territorios. 

En el norte de México, en áreas con extensos bosques y poblaciones de venados, el puma se destaca como el felino más grande sin competidores naturales.  

En contraste, el jaguar es más abundante en las costas y selvas tropicales del sureste del país. En el pasado, tanto pumas como venados se encontraban en todos los estados de México, pero esta situación ha cambiado debido a la alteración del entorno natural. 

Al invadir la ganadería de agostadero su hábitat, el puma se encuentra vulnerable. Se le atribuyen ataques al ganado y animales domésticos, más sin embargo, esto ocurre, cuando su comida escasea. Uno de los factores principales es la casería del venado, una de las presas favoritas del puma.

El puma es una criatura excepcionalmente versátil que puede adaptarse a diversos hábitats, aunque es más común en los bosques templados del norte que en las regiones semiáridas de México y las zonas tropicales del centro de América. Su tamaño varía, generalmente pesa entre 30 y 40 kilos, aunque algunos individuos pueden alcanzar los 60 o incluso 100 kilos.  

En comparación, el jaguar es más grande y robusto, con ejemplares en Brasil que llegan a pesar hasta 120 kilos. 

A diferencia de otros grandes felinos, el puma no ruge, pero puede ronronear, similar a un gato doméstico. Su piel es uniforme en color, lo que le valió el nombre científico Puma concolor, con «puma» significando poderoso en quechua y «con» en latín, que significa uno solo (color).  

Los primeros europeos que llegaron a América lo llamaron «león de montaña» o «león americano» debido a su parecido con la hembra del león. 

La amenaza humana: desafíos de conservación. 

La principal amenaza para el puma es la actividad humana. La construcción de carreteras y otra infraestructura ha dañado su hábitat y disminuido la disponibilidad de presas naturales.  

Cuando escasea su alimento, los pumas recurren a cazar ganado o animales domésticos, lo que a menudo conduce a su caza por los seres humanos para proteger sus recursos. Este factor ha tenido un impacto significativo en las poblaciones de pumas. 

Es importante hacer conciencia y un llamado a no asesinar a este espécimen único, del cual se desconoce su población y el cual podría estar en peligro de extinción.

A diferencia de algunos otros felinos, el puma no es objeto de tráfico ilegal por su piel, ya que carece de patrones atractivos en su pelaje. Tampoco es una mascota común. 

Aunque oficialmente no se encuentra en la lista de especies en peligro de extinción, sus poblaciones están en «algún nivel de amenaza». 

La incógnita de las poblaciones de puma. 

Hasta la fecha, no se ha realizado un censo nacional de la población de pumas en México, lo que hace que la situación de este felino sea un enigma en términos de números.  

La falta de datos concretos dificulta la evaluación de su estado y la implementación de medidas de conservación efectivas. 

El rol del puma en el ecosistema 

El puma juega un papel crucial en los ecosistemas en los que habita. Su desaparición o disminución en número puede llevar a una simplificación del ecosistema. Con menos pumas, las presas naturales del felino, como los venados, pueden aumentar descontroladamente y sobrealimentarse de la vegetación, lo que afecta a otras especies. Por otro lado, donde la cacería ha eliminado las poblaciones de venados, los pumas también escasean. 

La esperanza de repoblar y restaurar el equilibrio ecológico. 

En áreas como la Reserva de la Biosfera Barranca de Metztitlán, Hidalgo, donde la cacería eliminó a los venados, los pumas están regresando. Están consumiendo otras especies como las zorras grises, los caballos y animales más viejos.  

Para evitar la desaparición del puma y promover el equilibrio ecológico, se están llevando a cabo esfuerzos para repoblar estas zonas con venados, lo que se espera reactive la presencia de otras especies y, gradualmente, restaure la biodiversidad en el área. 

El puma es un felino único y adaptable que enfrenta desafíos significativos debido a la actividad humana y la degradación de su hábitat. La falta de un censo nacional hace que su situación sea incierta, pero es claro que su conservación es esencial para mantener la integridad de los ecosistemas en los que habita. La esperanza radica en esfuerzos de conservación y repoblación que buscan restablecer el equilibrio en áreas donde su presencia es vital. 

Por: Gorki Belisario Rodríguez Ávila.

 Fotografía: HISTORIASMX / O.M.

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