A través de este relato y fotografías te invitamos a conocer la parroquia del Santo Cristo de Burgos, ubicada en ciudad Jiménez, en la zona centro.  

Historiasmx. – En el pintoresco pueblo de Jiménez, Chihuahua, se encuentra un tesoro histórico y espiritual: el Templo del Santo Cristo de Burgos. Su historia se remonta a los lejanos años de la colonia, cuando el Virrey de la Nueva España, Conde de Revillagigedo, encomendó al Capitán Bernardo Antonio de Bustamante y Tagle la fundación del Presidio Castrense de Santa María de las Caldas, dando origen a la actual población. 

El presidio tenía como objetivo proteger a los mestizos y españoles de los ataques indígenas y brindar refugio a los viajeros que transitaban por la región. 

Interior de la Parroquia del Santo Cristo de Burgos.

 Con el tiempo, en el entorno del presidio se erigió una capilla castrense dedicada a Nuestra Señora de las Caldas, cuya imagen, una pintura al óleo de estilo barroco, es considerada patrimonio religioso y cultural y ahora se encuentra en la Parroquia del Santo Cristo de Burgos. 

A finales del siglo XVIII, el Valle de Huejuquilla, también conocido como puesto del Santo Cristo de Burgos, ya contaba con una capilla para el culto religioso. 

 No obstante, esta resultaba insuficiente para la creciente población. Fue entonces cuando el Pbro. Rafael Nevárez y Solórzano, originario de España, tomó la iniciativa de construir un nuevo templo para reemplazar la capilla castrense. 

Campanas del Santo Cristo de Burgos.

Después de diversos avatares y esfuerzos, la construcción del templo finalmente inició en 1804 bajo la dirección del Arq. José María Borjas. Sin embargo, enfrentaron dificultades y cambios de arquitectos, lo que ralentizó el proceso. 

La tenacidad del Padre Nevárez, quien dedicó 20 años a la obra, fue fundamental para que el templo abriera sus puertas en julio de 1824. 

El templo fue edificado con materiales de la región, como adobes y madera, y contó con el apoyo de la comunidad, incluyendo hacendados, residentes, soldados y reos de la cárcel.  

Tras décadas de esfuerzo y perseverancia, se completaron las dos torres del templo y se instaló un reloj público en una de ellas. 

Torres de la parroquia.

En el interior del templo se aprecia una arquitectura de amplias naves, líneas sobrias y un retablo neoclásico labrado en cantera gris. El nicho contiene una imagen de bulto del Santo Cristo de Burgos, venerada por la comunidad durante siglos. 

El Templo del Santo Cristo de Burgos es un lugar de profunda significación para los habitantes de José Mariano Jiménez. Con su fiesta anual el 6 de agosto, el Santo Cristo sigue cobijando y guiando la fe y devoción de los fieles. 

Hoy en día, el templo sigue en pie, preservando su esencia a lo largo de los años. Su fachada de adobe resiste el paso del tiempo mientras resplandece bajo el sol, el frío y el calor, siendo un verdadero testimonio de la fe y la tenacidad de quienes lo construyeron y de la comunidad que lo ha cuidado y venerado durante generaciones. 

Fotografía: Historiasmx / Gorki Rodríguez.  

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