El Ojo de Dolores, conocido popularmente como la playa del desierto de Jiménez, es un lugar único en su tipo, que ofrece a los visitantes la oportunidad de disfrutar de aguas termales con temperaturas que oscilan entre los 20 y 35 grados centígrados, ideal para relajarse en compañía de familiares y amigos.
HISTORIASMX.- En el árido desierto del municipio de Jiménez, Chihuahua, se encuentra un verdadero paraíso natural: el Ojo de Dolores.

Este centro turístico y recreativo de aguas cálidas y cristalinas se ha consolidado como uno de los destinos más visitados de la región, especialmente durante la temporada vacacional de Semana Santa, cuando miles de turistas se adentran en este oasis para disfrutar de un merecido descanso.
Un Refugio en el Desierto: Playas Termales
El Ojo de Dolores, conocido popularmente como la playa del desierto de Jiménez, es un lugar único en su tipo, que ofrece a los visitantes la oportunidad de disfrutar de aguas termales con temperaturas que oscilan entre los 20 y 35 grados centígrados, ideal para relajarse en compañía de familiares y amigos. A pesar de que la cantidad de agua proveniente de los veneros ha disminuido con el paso de los años, sigue siendo una joya natural que ofrece una experiencia única en el corazón del desierto.

El manantial, que da vida a este lago termal, se encuentra rodeado por un ecosistema en constante interacción con los seres vivos que habitan la zona, lo que lo convierte en un sitio perfecto para quienes buscan no solo relajarse, sino también interactuar con la naturaleza.
Un Paraíso para el Relax y la Diversión
Bajo el sol ardiente del desierto, el Ojo de Dolores se presenta como un refugio en el que los visitantes pueden relajarse en sus cálidas aguas termales y disfrutar de diversas actividades. En la zona, se encuentran amplias áreas de sombra, asadores para disfrutar de una deliciosa carnita asada, juegos infantiles, baños y cómodas áreas de descanso. Para aquellos que desean prolongar su visita, también existe una zona de acampado donde es posible pasar la noche bajo las estrellas.

Además de las aguas termales, el lugar cuenta con un largo canal serpenteante de 2 kilómetros que invita a disfrutar de un paseo tranquilo y rodeado de belleza natural. El ambiente relajado y la oferta de servicios han convertido al Ojo de Dolores en el lugar favorito no solo de los habitantes de Jiménez, sino también de quienes lo visitan cada año, buscando escapar de la rutina y disfrutar de la naturaleza.
Fauna Única: Peces y Tortugas en el Ojo de Dolores
Uno de los aspectos más fascinantes del Ojo de Dolores es su fauna endémica, que incluye especies únicas que han logrado adaptarse a las condiciones del agua termal. Entre ellas, se destacan dos especies de peces que solo existen en este afluente: el Gambusia Hurtadoi, también conocido como guayacón de Dolores, y el Cyprinodon Macrolepis. Estas especies han sido catalogadas como únicas en el mundo debido a sus características morfológicas y su capacidad para vivir en aguas cálidas.

El Gambusia Hurtadoi es un pez carnívoro que se alimenta principalmente de insectos y otros invertebrados, mientras que el Cyprinodon Macrolepis, conocido por su comportamiento territorial, se alimenta de algas filamentosas y materia orgánica presente en el manantial. Además de estos peces, también habita en el lugar una variedad de tortugas de agua dulce, que pueden ser apreciadas por los visitantes cuando se encuentran en el interior del lago termal, en ausencia de personas.
Eventos Especiales y Música en Vivo
Durante la temporada alta de vacaciones, especialmente en Semana Santa, el Ojo de Dolores se llena de vida con actividades recreativas y musicales. Las tardes en el balneario son alegradas por música en vivo, donde bandas norteñas y de música de banda recorren el lugar ofreciendo a los visitantes un toque de alegría para completar su experiencia. La combinación de las aguas termales, la música y el ambiente relajado hacen de este lugar una opción perfecta para quienes buscan pasar un fin de semana diferente.
Acceso y Horarios
El Ojo de Dolores se encuentra a tan solo 20 minutos de la Ciudad de Jiménez, lo que lo convierte en un destino de fácil acceso para quienes desean escapar por un día o disfrutar de un fin de semana en este paraíso natural. Las instalaciones permanecen abiertas todos los días durante la temporada de frío de 7:00 a 18:00 horas, y se extienden hasta las 8:00 pm en los meses más cálidos.

Actividades para Todos los Gustos
Entre las actividades que se pueden realizar en el Ojo de Dolores se encuentran:
- Disfrutar de las aguas termales del lago o en su serpentina de 2 kilómetros.
- Relajarse bajo la sombra de los enormes árboles que rodean el área.
- Disfrutar de una carnita asada en los asadores disponibles.
- Conocer la fauna local, como los peces y las tortugas.
- Escuchar música en vivo mientras se disfruta de la atmósfera relajante.
Si lo tuyo es el ecoturismo, el Ojo de Dolores te ofrece una experiencia única que combina belleza natural, descanso y contacto con la fauna local. Además, sus instalaciones lo hacen el lugar perfecto para disfrutar en familia o con amigos.
Conclusión: Un Destino Imperdible
Si buscas un lugar para relajarte, disfrutar del contacto con la naturaleza y escapar de la rutina, el Ojo de Dolores es el destino perfecto para tus próximas vacaciones. Ya sea que planees un fin de semana largo o que desees aprovechar las vacaciones de Semana Santa, este lugar te garantiza una experiencia única en medio del desierto de Chihuahua, en un verdadero oasis de paz y naturaleza.
Por: Gorki Rodríguez.
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