A raíz de la inundación, más de 100 ejidatarios se quedaron sin trabajo, al no poder cosechar sal, dado que las salinas o charcas productoras quedaron bajo el agua. 

Jiménez Chihuahua (HISTORIAS).- A raíz de la inundación, más de 100 ejidatarios se quedaron sin trabajo, al no poder cosechar sal, dado que las salinas o charcas productoras quedaron bajo el agua. 

Jiménez Chihuahua. – A contratiempo desde la semana pasada, el departamento de Servicio Públicos de Jiménez realiza obras de contención de agua, en la comunidad de Estación Carrillo, región minera, productora de sal; para poder reactivar la producción, frenada tras la inundación por las fuertes lluvias ocasionadas durante el 2022, tiene sin trabajo a más de 100 ejidatarios. 

Laguna de Palomas o Estación Carrillo se encuentra en la porción sur de Jiménez, limítrofe del estado de Chihuahua, con los estados de Durango y Coahuila, en plena área de influencia de la Reserva del Bolsón de Mapimí. 

A dos horas de la cabecera municipal de Jiménez y una hora de la otra región productora de sal, Químicas del Rey, pero del estado de Coahuila; es una comunidad que tiene como principal actividad económica la producción de sal, que solo es posible por el clima árido de la zona y la extracción de agua del acuífero salino que lleva por nombre, según la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA), Laguna de Palomas.  

Durante el mes de septiembre del 2022, en todo el estado de Chihuahua, se registraron intensas lluvias atípicas, que ocasionaron inundaciones, de las cuales Estación Carrillo fue víctima, al desbordarse la Laguna de Palomas, ubicada metros arriba de las productoras de sal, paralizando por completo la producción. 

A raíz de la inundación, más de 100 ejidatarios se quedaron sin trabajo, al no poder cosechar sal, dado que las salinas o charcas productoras quedaron bajo el agua. 

Seis meses desde la inundación han pasado, y el agua aún no ha bajado lo suficiente para que los más de 100 ejidatarios que permanecen sin trabajo, puedan reactivar su principal actividad económica, la producción y cosecha de sal. 

En la comunidad de Estación Carrillo, conectada por la carretera que se encuentra en carente estado, Escalón-Carrillo, que se interseca con la Federal 49, Jiménez-Torreón; habitan según el INEGI 240 habitantes, en una región hostil por su clima desértico, cuya principal fuente económica es la producción de sal, o como medida alterna el trabajo de Jornaleros Agrícolas en los predios agrícolas productores de melón o hortalizas.  

La desesperación de la gente que tiene mucho sin trabajo es evidente y comprensible, menciona Jesús Cordero director de Servicios Públicos de Jiménez, enfatizando que falta poco para que los trabajos de contención del agua que se están haciendo en el bordo, pueden concluir esta semana 

Con la ayuda de maquinaria pesada, refiere Jesús Cordero, se está haciendo el trabajo -quedando ya únicamente un tramo de 80 metros por reparar y reforzar- par que los ejidatarios de Estación Carrillo puedan comenzar a bombear el agua al otro lado del bordo, con la ayuda de motobombas eléctrica y a gasolina, para poder desaguar las charcas productoras de sal.  

Una productora de sal en el Bolsón de Mapimí.  

A 1106 metros sobre el nivel del mar, en la comunidad de Estación Carrillo, la producción de sal comienza con la extracción de agua del acuífero salino Laguna de Palomas, que es cuatro veces más concentrada que el agua del mar. El agua extraída del pozo artesano se traslada por canales en la tierra hasta las concentradoras donde inicia el primer paso para la producción de sal.  

Las concentradoras, según Liot C. Grunberger O., son estanques de 150 m de largo por 100 m de ancho, en los que el agua de bombeo procedente del acuífero salino reposa durante cinco días con el fin de concentrarse y depositar las impurezas y sedimentos finos antes de ser transferida a las cristalizadoras por medio de una red de canales 

Luego pasa a las cristalizadoras que miden 200 metros de largo por 100 metros de ancho, las cuales son llenadas con una lámina aproximada de agua de 20 centímetros. 

Cada ejidatario administra una porción de 50 centímetros de largo por 4 de ancho, área delimitada por estacas. Aquí la cosecha de sal se realiza cuando el agua llega 3 centímetros en la cristalizadora. 

Previo a que se dé la cosecha, el agua concentrada se ha de evaporar con la acción del sol, durante un periodo de cuatro a cinco días, para dar paso a la formación de la sal. 

Cada cristalizadora produce alrededor de 600 toneladas. El tiempo de producción de la sal durante la temporada de calor dura máximo cinco días, mientras que en tiempo de frío hasta diez días. 

Una vez cosechada la sal, trabajo que se hace a mano con la ayuda de palas, la sal se almacena en montones a los costados de las charcas, para que su nivel de humedad se reduzca y así poder empacar en costales de 50 kilos o bien para su venta granel.  

A  6 meses de la inundación de las salinas, durante el mes de septiembre del 2022, más de cien ejidatarios se encuentran sin trabajo, y a la espera de que Servicios Públicos termine los trabajos de rehabilitación del bordo de contención del agua, para poder a bombear la misma y reactivar la producción de sal.  

Fotografía: Historias / Gorki Rodríguez.

Por: Gorki Rodríguez.

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