La comunidad desplazada ha estado esperando ayuda por cerca de tres semanas, mientras el temor y la inseguridad aumentan día a día. Las autoridades de los tres niveles de gobierno han sido exhortadas a actuar de manera inmediata para evitar más sufrimiento y salvar vidas.
HISTORIASMX. – Alrededor de 120 personas siguen atrapadas en las comunidades de Cinco Llagas y Los Placeres, esperando ser trasladadas a un lugar seguro mientras la violencia y el conflicto armado en la región continúan escalando. La situación se agrava cada día, con al menos seis personas más siendo atendidas por desnutrición, además de los cuatro menores que ya fueron trasladados a la capital para recibir tratamiento médico.
Desnutrición y Separación Familiar.
La asociación Consultoría Técnica Comunitaria informó que cuatro niños y dos adultos fueron ingresados a hospitales debido a complicaciones de desnutrición. Las condiciones de salud entre los desplazados son alarmantes: los niños padecen anemia y desnutrición, mientras que los adultos sufren de hipertensión, todo exacerbado por el estrés del desplazamiento forzado.
Operativo de Emergencia.
El pasado 6 de septiembre, un amparo fue promovido para la comunidad desplazada en Cinco Llagas, y seis días después se lanzó un operativo de seguridad junto a personal de las Secretarías de Salud y de Pueblos y Comunidades Indígenas para llevar alimentos y atención médica. Sin embargo, las condiciones siguen siendo precarias y las familias están divididas: algunas madres han tenido que abandonar a sus hijos y maridos en las comunidades en riesgo para trasladar a sus niños gravemente enfermos a Baborigame o Chihuahua.
Violencia en la Zona.
El conflicto armado entre grupos criminales sigue amenazando a estas comunidades, donde se escuchan disparos de manera constante. La situación se ha deteriorado aún más desde que se abrió un camino hacia Badiraguato, lo que ha intensificado la violencia en la región. Los desplazados temen por sus vidas, pero enfrentan obstáculos para denunciar la situación debido al miedo a represalias y a la negativa del Ministerio Público a recibir denuncias anónimas.
Urgencia por Reubicación.
Las organizaciones que brindan apoyo en la zona han hecho un llamado urgente para que las autoridades implementen la reubicación segura de las familias desplazadas. Se exige que se garantice un alojamiento digno, acceso a alimentos, atención en salud física y psicosocial, así como la construcción de viviendas seguras para restablecer una vida digna.
La comunidad desplazada ha estado esperando ayuda por cerca de tres semanas, mientras el temor y la inseguridad aumentan día a día. Las autoridades de los tres niveles de gobierno han sido exhortadas a actuar de manera inmediata para evitar más sufrimiento y salvar vidas.