Fotografía: Archivo.

No era cualquier defensor ambiental. Isidro Baldenegro fue galardonado con el Premio Goldman en 2005, considerado el Nobel ambiental. Pero en México, ni los premios ni el reconocimiento internacional protegen de las balas.

HISTORIASMX. – Isidro Baldenegro López, líder indígena rarámuri y reconocido defensor del bosque, fue asesinado el domingo 15 de enero de 2017 en Coloradas de la Virgen, municipio de Guadalupe y Calvo, al sur de Chihuahua. Tenía 51 años.

Le dispararon seis veces. Una bala atravesó su tórax y otra su pierna. Murió en la casa de su tío, a donde había llegado poco antes, luego de años de amenazas que lo obligaron a alejarse de su comunidad.

No era cualquier defensor ambiental. Isidro Baldenegro fue galardonado con el Premio Goldman en 2005, considerado el Nobel ambiental. Pero en México, ni los premios ni el reconocimiento internacional protegen de las balas.


Una herencia de lucha… y muerte

Isidro heredó el activismo de su padre, Julio Baldenegro, quien también se opuso a la tala ilegal en la Sierra Madre Occidental. Fue asesinado por sicarios en 1986. El crimen quedó impune, pero Isidro tenía solo 20 años cuando decidió continuar su lucha.

En 1993, fundó la organización Fuerza Ambiental, desde donde lideró una resistencia pacífica contra la tala de pino y roble en territorios indígenas. Organizó marchas, sentadas, y logró en 2002 la suspensión temporal de los permisos de tala gracias a la presión de ONG nacionales e internacionales.


Preso por defender el bosque

En 2003, el gobierno de Chihuahua lo arrestó bajo cargos fabricados de posesión de drogas y armas. Pasó 15 meses en prisión, hasta que fue liberado por falta de pruebas.

Amnistía Internacional lo declaró preso de conciencia, y su caso se volvió emblemático de cómo el Estado mexicano criminaliza a los defensores del medio ambiente en vez de protegerlos.


La bala que calló la resistencia

Pese a las advertencias, el gobierno nunca le brindó protección. Isidro vivía bajo amenazas constantes, y aún así regresó a su comunidad, donde finalmente fue asesinado.

La Fiscalía de Chihuahua dijo haber identificado al asesino, pero nunca se dio justicia real. Solo se dijo que huyó con una pistola calibre .38 Súper y “rumbo desconocido”.


El segundo Goldman asesinado en América Latina

La muerte de Isidro Baldenegro ocurrió menos de un año después del asesinato de Berta Cáceres, ambientalista hondureña también ganadora del premio Goldman, por oponerse a un proyecto hidroeléctrico en su país.

Ambos vivían bajo amenaza. Ambos fueron asesinados.


Una Sierra sin defensores

En la Sierra Tarahumara, la tala ilegal, el despojo y el fuego avanzan como nunca antes.

¿Dónde están los que podían alzar la voz?
Antonio Montes Enríquez, asesinado en 2020.
Isidro Baldenegro, asesinado en 2017.
Julio Baldenegro, asesinado en 1986.

Los mataron por defender lo que el Estado permitió destruir.


¿Quién cuida los bosques cuando asesinan a los guardianes?

Mientras el negocio de la madera ilegal, los megaproyectos y la impunidad avanzan por la Sierra Madre Occidental, los pueblos indígenas pierden su tierra, su voz y sus vidas.

México es hoy uno de los países más letales para defensores del medio ambiente.
Entre 2010 y 2015, 33 activistas fueron asesinados, según Global Witness.
Con Isidro Baldenegro, la cifra siguió creciendo.


🕯️ “Este premio se lo dedico a mi padre. Él se lo merecía más”, dijo Isidro al recibir el Goldman en 2005.

🔴 Hoy, ambos están muertos. Pero no por accidente: los mataron por proteger la vida.


Por historias

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