La utilización de técnicas como el uso de bulldozers para realizar tajos ha facilitado el análisis detallado de estos prospectos, proporcionando datos valiosos para futuras exploraciones y evaluaciones económicas.
HISTORIASMX. – La vasta región suroriental del estado de Chihuahua, que abarca aproximadamente 2,000 km², se presenta como un territorio de gran relevancia geológica y económica, con Jiménez, Chih., siendo la población más cercana y principal núcleo de acceso a esta área.
Desde esta ciudad, el Ferrocarril Central México-Ciudad Juárez y la carretera estatal Torreón-Jiménez (Chihuahua número 9) ofrecen las principales vías de comunicación hacia los depósitos de Corralitos, localizados al sur de la región.
El transporte de los recursos extraídos de esta área, como el caolín, se realiza principalmente desde la estación de Corralitos, a tan solo un kilómetro del Km 37 de la carretera Torreón-Jiménez. A través de un entramado de brechas de 62 km, que permiten el tránsito de vehículos de rodada alta durante todo el año, se puede acceder a otros prospectos importantes como el de Rancho Blanco-Maravillas.
Fisiografía y Formación Geológica
La región, clasificada como parte de la provincia fisiográfica de Cuencas y Sierras según Raisz (1959), presenta un relieve marcado por la imponente Sierra de Los Remedios, que alcanza una altura promedio de 2,000 metros.
Esta sierra domina la parte oriental, mientras que el centro y oeste se encuentran a unos 1,400 metros sobre el nivel del mar, con un relieve relativamente bajo que no supera los 100 metros. La cuenca hidrográfica del Río Florido es la principal responsable de los elementos hidrográficos de esta área, la cual aún se encuentra en una fase geomorfológica de juventud.
Depósitos y Exploración: Un Pasado y Presente de Riqueza Geológica
Los yacimientos de arena de cuarzo y caolín en Corralitos han sido motivo de interés desde hace más de dos décadas, aunque las explotaciones han sido mínimas, limitadas principalmente a la extracción en lotes como Santa Rosa y Fausto. Sin embargo, es en la formación Maravillas, una secuencia de derrames de lodo, conglomerados y tobas, donde se encuentran los depósitos más importantes de arena de cuarzo, recurso clave en la industria. Este hallazgo, ubicado en la parte superior de la formación, revela un entorno geológico complejo donde la erosión y la actividad hidrotermal han jugado un papel clave en la alteración y formación de estos depósitos.
Formación Maravillas: Un Recurso por Explorar
La Formación Maravillas, que se extiende por más de 2,500 km², es un foco crucial en los estudios geológicos debido a los ricos depósitos de arena de cuarzo que alberga. Esta unidad, formada durante el Mioceno y Plioceno temprano, se caracteriza por su coloración predominantemente clara, lo que facilita su identificación en fotografías aéreas. Los afloramientos de arenisca tobácea y cuarzo, cubiertos por derrames volcánicos, constituyen una ventana geológica fascinante que apenas comienza a revelarse a través de los estudios preliminares.
La historia geológica de la región se encuentra marcada por una intensa actividad volcánica y erosiva, lo que ha dado lugar a la creación de mesetas, formaciones abruptas y depósitos de conglomerados de origen volcánico. Estas características han permitido que la zona conserve una riqueza en minerales que aún no ha sido completamente explotada.
Exploración Continua
A medida que se avanza en la caracterización de las muestras de la zona, nuevos detalles emergen sobre la formación geológica y los recursos que se encuentran en Corralitos y Rancho Blanco. La colaboración entre instituciones, como el Instituto de Geología y laboratorios especializados, sigue siendo fundamental para el desarrollo de este estudio. Sin embargo, aún quedan preguntas por responder sobre la extensión total de los depósitos y las posibilidades económicas que pueden generar para la región.
Este es solo el comienzo de un proceso que promete revelar un tesoro geológico en la región suroriental de Chihuahua, donde cada nuevo hallazgo podría transformar el panorama económico y científico de la zona.
La Zona de Estudio en Rancho Blanco.
A lo largo del camino que conduce a Rancho Blanco, aproximadamente 5 km antes de llegar, se pueden observar afloramientos de arenisca tobácea de grano fino y depósitos de arena poco compacta. Estos depósitos se localizan cerca del Arroyo de las Pampas y se encuentran en contacto con una gruesa secuencia de lodolita, limolita y conglomerado que forman la parte superior de la formación Maravillas. La arena de esta área varía de fina a muy fina y contiene un alto porcentaje de arcilla y magnetita. Las muestras recolectadas en esta zona, como Pa-140, Pa-139 y Pa-141, muestran variaciones significativas en el contenido de arcilla, con Pa-142 destacando por su bajo contenido de arcilla y alto porcentaje de granos medianos, lo que la hace la más prometedora de todas.
Para facilitar la exploración y el análisis de este prospecto, se ha utilizado un bulldozer para realizar un tajo similar al de Santa Rosa. Este método ha permitido una visión más clara de las formaciones geológicas y ha facilitado la recolección de muestras en áreas de difícil acceso.
Un kilómetro al norte de Rancho Blanco, otro depósito de arena similar fue localizado en la cabecera del arroyo que alimenta el presón del rancho. Esta muestra, Pa-142, presenta arena mediana a fina con fragmentos de roca volcánica y magnetita, y se distingue por su bajo contenido de arcilla, lo que la convierte en una opción valiosa para futuras exploraciones.
En el prospecto de Cerro Blanco, ubicado 1.5 km al sur del poblado homónimo, se observa una exposición de la formación Maravillas que incluye tobas epiclásticas, conglomerados finos y areniscas tobáceas con cuarzo, cubiertas por aluvión. La topografía en esta área es suave, con un relieve de aproximadamente 20 m. Aunque las areniscas y tobas están cubiertas por derrames de dacita y presentan una inclinación al oriente, la arena es bastante arcillosa y con pocas posibilidades económicas. Sin embargo, dada la extensión del área, no se debe descartar la posibilidad de encontrar depósitos económicamente viables mediante una exploración más sistemática.
El prospecto de Uribe, situado a unos 6 km al noreste de Corralitos, destaca por sus afloramientos de arenisca tobácea cuarzosa. Las capas varían de delgadas a medianas y presentan un color blanco a crema característico de la formación Maravillas. Aunque algunas capas presentan estratificación cruzada y un alto contenido de arcilla, la compactación de las areniscas es alta y la erosión ha limitado la presencia de arena en los lugares menos erosionados.
En San Juan, se encuentra un afloramiento de arena de cuarzo ubicado a 1 km al sureste del Rancho San Juan. La única cata realizada muestra una arena bastante arcillosa, cubierta por tobas y derrames de dacita. A pesar de la presencia de materia arcillosa en la muestra, el contenido de arcilla es sorprendentemente bajo en comparación con la apariencia visual.
El análisis granulométrico de las 12 muestras recolectadas durante el trabajo de campo revela características significativas. Las muestras presentan un «coeficiente de Trask» (So) que varía entre 1.24 y 1.77, indicando que la mayoría de los sedimentos están bien clasificados. Este análisis proporciona información detallada sobre la distribución de tamaños de grano y el grado de clasificación de las arenas, lo que es crucial para determinar su viabilidad económica y potencial de explotación.
En conclusión, la región de Chihuahua presenta una variedad de prospectos minerales con características geológicas y granulométricas diversas. La utilización de técnicas como el uso de bulldozers para realizar tajos ha facilitado el análisis detallado de estos prospectos, proporcionando datos valiosos para futuras exploraciones y evaluaciones económicas. La continuidad en la exploración y el análisis detallado de estos depósitos será clave para determinar su potencial y viabilidad a largo plazo.
Por: Gorki Rodríguez.