Este corredor cultural en Jiménez, que incluye los sitios arqueológicos de Los Remedios, Cañada Roja y Cueva de las Campanas, es un testimonio invaluable de la historia y cultura de los Tobosos y otras tribus. 

Jiménez, Chihuahua (historiasmx). – En lo más salvaje del desierto de Chihuahua, en el municipio de Jiménez, se encuentra un tesoro oculto: «La Cañada Roja», también conocida como la Cascada de los Chuzos.  

Aquí, el arqueólogo Luis Aveleyra Arroyo de Anda descubrió en 1979 una de las más impresionantes representaciones de arte rupestre en el sur del estado de Chihuahua.  

Patrograbados con flechas tipo shumla y humanos, posiblemente se trata de una escena de cacería.

Estos petrograbados, que datan del año mil al 200 a.C., ofrecen un fascinante viaje a través del tiempo y nos permiten conocer la cultura de los antiguos pobladores nómadas cazadores-recolectores. 

Explorando el legado ancestral: 

El sitio arqueológico de «La Cañada Roja» es un testimonio asombroso del desarrollo cultural que tuvo lugar entre los años 300 y 900 d.C. A través de sus petrograbados, predominan las puntas de flecha tipo Shumla, una forma estudiada por arqueólogos norteamericanos al suroeste de Texas.  

Puntos marcados sobre la roca de la cueva, posiblemente se trate de un calendario.

Este lugar fue un hábitat idóneo para tribus nómadas cazadores-recolectores, ya que las referencias geográficas y climáticas indican la presencia de importantes afluentes de agua en el pasado. 

El misterio en las piedras: 

Entre las representaciones rupestres más abundantes en el sitio, se encuentran las puntas de flecha tipo Shumla, fechadas actualmente entre el 1,000 y el 200 a.C. También, se hallan figuras antropomorfas, sierras, animales y una peculiar «S» que identifica el sitio, cuya cañada dibuja una curva sinuosa desde la cueva hasta el final del cerro. Además, la «Cueva de los Remedios» muestra interesantes figuras geométricas que representan las sierras, el entorno geográfico que rodeaba a las antiguas tribus nómadas. 

Debajo de la cueva, corre un cañón de más de cien metros de profundidad.

Un legado para proteger: 

La importancia de preservar y proteger estos sitios arqueológicos es fundamental para las futuras generaciones.  

Este corredor cultural en Jiménez, que incluye los sitios arqueológicos de Los Remedios, Cañada Roja y Cueva de las Campanas, es un testimonio invaluable de la historia y cultura de los Tobosos y otras tribus, antiguos pobladores de la región.  

Además, su estudio y análisis permiten una mejor comprensión de las culturas que habitaron el sur del estado de Chihuahua. 

Después de un largo camino, por fin llegamos a la cueva de las pinturas rupestres.

La Cascada de los Chuzos, más allá de su majestuosa belleza natural, alberga un patrimonio histórico y cultural invaluable: las representaciones rupestres de los antiguos pobladores de la región.  

Este tesoro oculto en lo más agreste del desierto de Chihuahua nos transporta a un pasado remoto, a través de figuras antropomorfas y puntas de flecha tipo Shumla.  

Dentro de la cueva hay representaciones de petrobados y arte rupestre.

Es imprescindible resaltar la importancia de preservar y proteger estos tesoros arqueológicos para que las futuras generaciones también puedan disfrutar y aprender de la rica historia de la región sur de Chihuahua. ¡Ven y sumérgete en la aventura para descubrir el legado ancestral de «La Cañada Roja» en el corazón del desierto chihuahuense! 

Por: Gorki Belisario Rodríguez Ávila.  

Fotografía: Historiasmx.  

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