Atletas jimenenses conquistan la Sierra Tarahumara: una travesía de resistencia, paisajes y pasión por el deporte


Daniel Mariscal y Manuel Cano, orgullosos integrantes del Club de Atletismo Correcaminos de Jiménez, se enfrentaron al reto de los 100 kilómetros de recorrido, atravesando profundos barrancos, caminos empedrados, valles cubiertos de neblina y senderos rodeados por la imponente vegetación de la Sierra.

HISTORIASMX. – En el corazón de la majestuosa Sierra Tarahumara, dos atletas jimenenses dejaron huella en uno de los eventos más desafiantes del continente: el Ultramaratón de los Cañones, que en su edición número XXVIII se celebró del 3 al 6 de julio de 2025 en el pintoresco municipio de Guachochi, Chihuahua.

Daniel Mariscal y Manuel Cano, orgullosos integrantes del Club de Atletismo Correcaminos de Jiménez, se enfrentaron al reto de los 100 kilómetros de recorrido, atravesando profundos barrancos, caminos empedrados, valles cubiertos de neblina y senderos rodeados por la imponente vegetación de la Sierra.

Fotografía: Cortesía / Daniel MARIZCAL

“Desde que pones un pie en Guachochi, sientes algo distinto en el aire. No es sólo una competencia, es una experiencia que transforma tu mente, tu cuerpo y tu espíritu,” comparte emocionado Daniel Mariscal, tras cruzar la línea de meta.

¿Qué es el Ultramaratón de los Cañones?

El Ultramaratón de los Cañones es una de las carreras más emblemáticas del país y del continente, reconocida por su dureza, belleza natural y por reunir a corredores de todo el mundo. Se corre en territorio rarámuri, hogar de los legendarios corredores tarahumaras, herederos de una cultura de resistencia milenaria.
La edición 2025 ofreció distancias de 10, 21, 63 y 100 kilómetros, además de una carrera infantil, reafirmando su carácter incluyente y formativo.

El debut en los 100K: más que una meta, un sueño

Aunque ya habían participado anteriormente en otras distancias del evento, esta fue la primera vez que ambos compitieron en la categoría reina de los 100 kilómetros.

“La preparación comenzó más de un año antes. No se trata sólo de correr, sino de construir una mentalidad fuerte. Tienes que aprender a lidiar con el dolor, la fatiga y la soledad del camino,” expresa Manuel Cano, quien logró terminar entre los primeros 40 competidores de su categoría.

Manuel Cano.

Por su parte, Daniel Mariscal explicó que los entrenamientos fueron intensos y muy variados, incluyendo sesiones de fuerza, técnicas de respiración, control de ritmo y entrenamientos largos en altitud para simular las condiciones de la Sierra.

“Hay días donde sientes que no puedes más, pero entonces recuerdas por qué empezaste. Es ahí donde te haces más fuerte,” comenta con una sonrisa.

Una odisea entre barrancas, ríos y nubes

Ambos corredores coinciden en que la carrera no sólo se vive con los pies, sino con todos los sentidos. Durante las 18 horas máximas de competencia, atravesaron paisajes de ensueño:

  • Barrancas profundas cubiertas por la niebla matutina
  • Ríos cristalinos que cruzan los senderos serpenteantes
  • Bosques de pino y encino que acompañan el trayecto con su aroma
  • Pueblos rarámuri donde los niños aplauden al paso de los corredores

“Hubo un momento en el que el sol comenzaba a salir sobre una barranca, y todo se iluminó de color dorado. Sentí que estaba corriendo dentro de una postal,” recuerda Daniel.

Una meta que se transforma en nuevo comienzo

Manuel logró ubicarse en la posición 23, mientras que Daniel, aunque no reveló su posición exacta, se mostró profundamente satisfecho con su desempeño:

“Terminar una carrera así no es sólo cuestión de piernas, sino de corazón. Estoy feliz con el resultado, pero más aún con lo que aprendí,” afirmó con humildad.

Ambos atletas ya se encuentran preparando futuras competencias y motivan a más jóvenes a seguir el camino del deporte.

Correcaminos de Jiménez: sembrando disciplina y pasión

El Club de Atletismo Correcaminos, al que pertenecen Daniel y Manuel, se ha convertido en una verdadera escuela de vida. Desde hace años, impulsa a niños y jóvenes del municipio a desarrollar su potencial físico, pero también su carácter.

“El atletismo me enseñó a ser disciplinado, a tener metas y a no rendirme. Eso se aplica en la vida, no sólo en la pista,” afirma Manuel.

Un mensaje para la juventud deportista

“A quienes sueñan con alcanzar metas grandes, les decimos: ¡sí se puede! Sólo necesitas creer en ti, trabajar cada día y no dejar que el miedo te frene. Nosotros venimos de un municipio pequeño, pero los sueños no conocen fronteras,” — Daniel Mariscal.

Porque cada zancada cuenta, cada gota de sudor vale y cada paso nos acerca a quienes queremos ser. Que el ejemplo de estos atletas sea un llamado a correr, pero también a soñar. 🏃‍♂️🏃‍♀️🌄

Por: Gorki Rodríguez.

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