El principal depredador del venado Bura es el Puma.
HISTORIASMX. – En las vastas extensiones del Desierto Chihuahuense, donde las condiciones climáticas son extremas y los recursos son limitados, emerge la fascinante historia de adaptación del venado bura (Odocoileus hemionus). Conocido como venado mulo o simplemente bura, este majestuoso herbívoro ha desarrollado mecanismos únicos para sobrevivir en zonas áridas, especialmente en la Reserva de la Biosfera de Mapimí, ubicada en el vértice de los estados de Durango, Chihuahua y Coahuila.
El venado bura, de actividad crepuscular, ha sido objeto de un extenso estudio que revela sus patrones de comportamiento, hábitos alimenticios y estrategias de supervivencia en un entorno desafiante. Un equipo de investigadores ha utilizado técnicas avanzadas como la radiotelemetría para rastrear y comprender la vida de estos animales en su hábitat natural.
La radiotelemetría implica la captura controlada de venados, donde se les coloca un collar especial con un transmisor. Este dispositivo permite a los investigadores seguir sus movimientos y actividades durante ciclos de 24 horas. Gracias a este método, se ha descubierto que el venado bura es más activo al amanecer y al atardecer, evitando las altas temperaturas que superan los 40°C al mediodía.
Las áreas de descanso preferidas por estos venados en Mapimí han sido identificadas como aquellas con una asociación vegetal de gobernadora (Larrea tridentata), nopal rastrero (Opuntia rastrera) y ocotillo (Fouquieria splendens). La radiotelemetría ha revelado que pasan la mayor parte de su tiempo descansando (63.41%), seguido de actividades como caminar, estar parados o alimentándose intermitentemente (21.26%). Sorprendentemente, dedican la menor cantidad de tiempo a alimentarse directamente (15.34%).
Este comportamiento puede indicar la distribución espacial dispersa de los recursos alimenticios o, posiblemente, una estrategia para evitar depredadores, siendo el puma el principal enemigo en la región.
El estudio continuo de la población de venados bura en la Reserva de la Biosfera de Mapimí no solo arroja luz sobre la asombrosa adaptabilidad de estas criaturas, sino que también destaca la importancia de conservar y comprender la vida silvestre en entornos desafiantes como el Desierto Chihuahuense.
Fotografía: David W. Boston.