Fotografía: Archivo.

Esta versión concuerda con la explicación oficial del embajador estadounidense en México, Ken Salazar, quien afirmó que Guzmán López se entregó voluntariamente y que Zambada fue trasladado en contra de su voluntad.

HISTORIASMX. – La reciente captura de Ismael «El Mayo» Zambada, el infame fundador del Cartel de Sinaloa, ha desatado un torbellino de especulaciones y reacciones tanto en México como en Estados Unidos. En una carta difundida por su abogado a periódicos estadounidenses, Zambada ha ofrecido una versión detallada de los eventos que llevaron a su detención el 25 de julio.

En el documento, Zambada asegura que fue secuestrado tras llegar a una reunión en las afueras de Culiacán, donde se suponía que iba a encontrarse con el gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, y Héctor Melesio Cuén, exalcalde de Culiacán. Según el capo, la reunión fue organizada por Joaquín Guzmán López, hijo de El Chapo, con el fin de “resolver diferencias entre líderes políticos”. Sin embargo, en lugar de un encuentro diplomático, Zambada afirma que fue emboscado por un grupo armado, capturado y trasladado en un avión privado a El Paso, Texas. “La idea de que me entregué o cooperé voluntariamente es completamente falsa”, declara en la carta.

Esta versión concuerda con la explicación oficial del embajador estadounidense en México, Ken Salazar, quien afirmó que Guzmán López se entregó voluntariamente y que Zambada fue trasladado en contra de su voluntad. Salazar también aclaró que no se utilizaron recursos estadounidenses en la rendición, desmintiendo rumores previos sobre el origen del avión y los agentes involucrados.

El gobernador Rubén Rocha ha desmentido las acusaciones de implicación en el operativo, afirmando que estaba fuera del país el día del arresto y que no tuvo conocimiento previo del operativo. “No hay absolutamente nada que pueda vincularme con ese asunto”, declaró Rocha, enfatizando la falta de complicidad con el crimen organizado.

La captura de El Mayo Zambada ha causado un gran revuelo en México. El capo de 76 años, que había estado oculto en la sierra de Sinaloa durante décadas, fue finalmente visible para las autoridades estadounidenses. Los detalles de su captura han suscitado numerosas preguntas y tensiones entre las dos naciones.

El presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador ha expresado que su gobierno no tuvo participación en la operación y que no fue consultado ni informado al respecto. Esta falta de comunicación ha generado fricciones en la relación bilateral entre México y Estados Unidos, especialmente en temas de seguridad.

Salazar ha intentado mitigar las tensiones, asegurando que Estados Unidos no tuvo conocimiento de la presencia de Zambada y Guzmán López en el avión hasta poco antes del arresto. “Estábamos sorprendidos cuando eso pasó y desde el momento en que lo supimos, estuvimos en contacto con el gobierno mexicano”, indicó el embajador.

En su carta, Zambada también refuta la versión oficial sobre la muerte de Héctor Cuén, alegando que el exalcalde fue asesinado en el mismo lugar y momento en que él fue secuestrado. Expresó su pesar por la muerte de Cuén y de sus compañeros de seguridad, José Rosario Heras López y Rodolfo Chaidez, quienes han desaparecido desde entonces.

El Mayo concluye su carta haciendo un llamado a la transparencia de los gobiernos de México y Estados Unidos y apelando a la calma en Sinaloa. “Nada puede resolverse con la violencia”, pide Zambada, instando a sus seguidores a mantener la paz en un momento de gran agitación.

La detención de uno de los capos más notorios del narcotráfico marca un capítulo crucial en la lucha contra el crimen organizado, dejando abiertas numerosas interrogantes sobre los detalles y las implicaciones del operativo.

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