Según la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), este refuerzo tiene el propósito de “reforzar el actual despliegue operativo en el municipio”.
HISTORIASMX. – Elementos de élite del Cuerpo de Fuerzas Especiales del Ejército Mexicano fueron desplegados en Culiacán, Sinaloa, este viernes, después de que Ismael “El Mayo” Zambada, líder del Cártel de Sinaloa, y Joaquín Guzmán López, hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán, se entregaran en un aeropuerto de El Paso, Texas.
Según la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), este refuerzo tiene el propósito de “reforzar el actual despliegue operativo en el municipio”. Los efectivos militares, que llegaron en una aeronave de la Guardia Nacional, están especializados en rapidez, movilidad y capacidad de despliegue, así como en el uso de armamento avanzado y equipos especializados.
La misión de estos militares es colaborar estrechamente con las autoridades locales para reducir las actividades ilícitas de los grupos delictivos en la región, garantizando la libertad, el orden y la paz pública.
El despliegue de las fuerzas especiales se produce un día después del arresto de Ismael “El Mayo” Zambada y Joaquín Guzmán López por parte de autoridades estadounidenses en un aeropuerto de El Paso, Texas. Aunque no está claro si la detención fue el resultado de un operativo encubierto por parte del Departamento de Seguridad Nacional y el FBI, o si se trató de un acuerdo con las autoridades estadounidenses, la captura ha sido confirmada por el Departamento de Justicia.
Ambos líderes del Cártel de Sinaloa enfrentan múltiples cargos en Estados Unidos, que incluyen conspiración, homicidio, lavado de dinero y tráfico de drogas. El Mayo Zambada es buscado por varias cortes en los Estados Unidos por su papel en la fabricación y tráfico de fentanilo, mientras que el Cártel de Sinaloa está acusado de producir y distribuir este y otros narcóticos.
La administradora de la DEA, Anne Milgram, afirmó que el arresto de estos líderes del narcotráfico representa “un duro golpe al corazón del cártel”, destacando que el Cártel de Sinaloa es responsable de gran parte del tráfico de fentanilo y metanfetamina en los Estados Unidos.
Con el reciente refuerzo en Culiacán, las autoridades buscan asegurar el control y la estabilidad en la región mientras continúan las investigaciones y se lleva a cabo el procesamiento de los detenidos.