La familia ahora busca una compensación adecuada por los daños físicos, morales y psicológicos sufridos, en un esfuerzo por asegurar que Samantha pueda recuperarse completamente .
HISTORIASMX. – La familia de una joven de quince años, quien sufrió graves lesiones en un accidente en el balneario Las Pampas la semana pasada, está exigiendo una reparación por los daños físicos y psicológicos que la adolescente aún enfrenta. Samantha M, la afectada, sigue incapacitada para retomar su vida normal, incluyendo su educación y actividades de baile.
El accidente ocurrió el sábado 4 de mayo, cuando Samantha fue succionada por una tubería mientras caminaba por la orilla de la alberca. A pesar de los esfuerzos de los presentes, la joven quedó atrapada hasta que un empleado del balneario logró apagar la bomba y liberarla. Como resultado, Samantha sufrió una lesión en la pierna y casi se ahoga, lo que la dejó con un rostro cianótico y la necesidad de oxigenoterapia urgente.
Trasladada inicialmente a un hospital local y luego al Hospital Infantil de Chihuahua, Samantha ha continuado con tratamiento de oxígeno en su hogar para prevenir complicaciones como una posible neumonía, que los médicos atribuyen a la aspiración de agua durante el incidente. Su madre, Selene Cano, enfermera titulada, ha estado cuidando de ella en casa y señaló que están en espera de una evaluación detallada de los daños pulmonares.
Selene Cano también ha expresado su preocupación por la falta de medidas de seguridad en el balneario, resaltando la necesidad urgente de mejoras para evitar futuras tragedias. Además de los desafíos físicos, Samantha enfrenta dificultades emocionales significativas, manifestando episodios frecuentes de llanto y miedo intenso a la muerte debido a su traumática experiencia.
La situación también ha afectado sus aspiraciones a corto plazo, ya que la lesión en la pierna le impide participar en una próxima competencia de baile a nivel nacional y podría requerir cirugía plástica debido a la pérdida de tejido en la extremidad afectada.
La familia ahora busca una compensación adecuada por los daños físicos, morales y psicológicos sufridos, en un esfuerzo por asegurar que Samantha pueda recuperarse completamente y que se implementen las necesarias reformas de seguridad en el balneario.