La situación climática en Chihuahua ha sido crítica en la última década, con tres periodos severos de sequía. Aunque en 2013 y 2014 las lluvias aliviaron temporalmente la crisis, la tendencia ha sido la disminución del agua disponible.
HISTORIASMX. – La Presa Piedras Azules, ubicada en la Colonia Búfalo del estado de Chihuahua, se encuentra al borde de la desaparición debido a la falta de lluvias que azota a gran parte de la región. Actualmente, el embalse, que en su momento fue presentado como un proyecto clave para el riego y el desarrollo agrícola, se ha reducido a un simple charco, evidenciando la crisis hídrica que enfrenta la entidad.
Una inversión millonaria en riesgo
El Proyecto Piedras Azules fue inaugurado con bombo y platillo por el entonces director general de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), David Korenfeld, y el exgobernador César Duarte Jáquez. La construcción de la presa implicó una inversión conjunta entre el gobierno federal y estatal de 162.9 millones de pesos, con la promesa de garantizar agua para el riego de 665 hectáreas y beneficiar a 590 familias de la región.
Durante la inauguración, Korenfeld otorgó un título de concesión al gobierno estatal que garantizaba el uso de 12 millones de metros cúbicos anuales de agua, cifra que superaba en cuatro millones la capacidad real del embalse, estimada en 8 millones de metros cúbicos. Sin embargo, la cruda realidad es que hoy la presa apenas contiene agua suficiente para subsistir.
Sequía extrema y promesas incumplidas
La situación climática en Chihuahua ha sido crítica en la última década, con tres periodos severos de sequía. Aunque en 2013 y 2014 las lluvias aliviaron temporalmente la crisis, la tendencia ha sido la disminución del agua disponible. Actualmente, 16 municipios del estado enfrentan un régimen de lluvias errático, lo que agrava la problemática hídrica y deja en duda la viabilidad de proyectos como Piedras Azules.
El delegado de Conagua en Chihuahua, Alex Lebaron González, detalló que la presa se sitúa sobre el río Parral, dentro de la cuenca del río Conchos, y que su diseño original contemplaba el almacenamiento de 9.91 millones de metros cúbicos de agua. Además, en el embalse se introdujeron especies de peces como carpa, tilapia y bagre, con la intención de fomentar la pesca local.
Un futuro incierto
El colapso de la Presa Piedras Azules deja muchas interrogantes sobre la planificación y viabilidad de proyectos hídricos en Chihuahua. La crisis no solo afecta a los agricultores que dependían de este embalse, sino que también expone la falta de estrategias sostenibles para el manejo del agua en un estado donde la precipitación anual apenas alcanza los 431 milímetros, menos de la mitad del promedio nacional de 778.6 milímetros.
Mientras tanto, las comunidades rurales de Búfalo, Ignacio Ramírez, Plan de Ayala y Felipe Ángeles, que debían beneficiarse con este proyecto, ven cómo la esperanza de un riego garantizado se evapora junto con el agua de la presa.
¿Fue Piedras Azules una solución o un espejismo?