La falta de viáticos para recopilar la noticia, la filtración de información desde dentro del medio, la falta de un seguro de vida  y sueldos de hambre, ponen en riesgo a la materia prima de un medio, los reporteros/periodistas, antes que el crimen organizado.  

Jiménez Chihuahua (Historias). – De acuerdo a reporteros de Sin Fronteras, cerca del 80% de los periodistas asesinados durante el 2022, fueron violentados por causas relacionadas a su profesión. En México en uno de los países más mortales para ejercer el periodismo. 

De antaño, las amenazas para los reporteros/periodistas, han provenido del crimen organizado, políticos y/o funcionarios públicos y el aparato de seguridad del sistema, el aparato represor de cualquier gobierno, los policías. 

Aunque el esquema de riesgo para los periodistas/reporteros, es el anterior descrito, poco se habla de que en muchas de las ocasiones las casas editoras tradicionales, como algunos periódicos, junto con las nuevas empresas de creación y difusión de noticias, ponen más en peligro a los periodistas/reporteros, que el mismo crimen organizado.  

Por citar un ejemplo, en el estado de Chihuahua, en la mayoría de los medios de comunicación se caracterizan por el bajo sueldo, que va de los 5 mil a 10 mil pesos mensuales, salario que no alcanza para un reportero/periodista que posee familia, y tiene que pagar alimentación, mantenerse o mantener una familia, pagar los servicios básicos de primera necesidad y más aún cuando tiene que pagar vivienda. 

Los salarios de hambre son el primer factor de riesgo que las empresas ejercen contra los periodistas/reporteros. 

Con la romanización de la “camiseta por sacar la información” los patrones abusan de los reporteros/periodistas, obligándolos a trabajar fuera de su horario laboral y en caso de no hacerlo, la materia prima del medio es hostigado y amenazando con sanciones o despidos.  

Asimismo, la falta de seriedad de algunos jefes de información, directores y mismos reporteros/periodistas, por filtrar información de dentro hacía afuera, pone en peligro al grupo, por vulnerar información sensible que puede poner riesgo la vida de uno o más reporteros o periodistas.  

En casi todos los medios de información, pero más en algunos periódicos, a los periodistas/reporteros se les obliga a recopilar la información y viajar en vehículos propios (en caso de un accidente la empresa se deslinda al decir que no estaba en vehículo oficial), mermar su salario al no recibir viáticos para la gasolina y transporte, así como el brindar el nulo equipo laboral y herramientas necesarias para realizar el trabajo. 

México, el país más peligroso para ejercer el periodismo, es parte del vivir diario del periodista/reportero, el cual se suma al nulo seguro de vida que las empresas periodísticas proporcionan a sus empleados de la fuente, vulnerando su seguridad al tener en cuenta de la situación actual y de años en México, para con los periodistas.  

El periodismo que es elemental para la sociedad requiere de atención y acción por parte de las autoridades federales de México, para con las empresas periodísticas, para que estas mismas brinden la seguridad, reivindicación y no pongan en riesgo mediante sus acciones de esclavismo a los reporteros/periodistas.  

Por: Gorki Belisario Rodríguez Ávila.

Fotografía: Historias.

Por historias