Fotografía: Archivo.

Explorar la Cueva de los Cristales no es una tarea fácil. Sin la protección adecuada, los trabajadores solo pueden soportar unos diez minutos de exposición continua debido a las altas temperaturas y la humedad.

HISTORIASMX. – En abril del año 2000, los hermanos mineros Eloy y Javier Delgado hicieron un descubrimiento asombroso mientras excavaban un nuevo túnel para la compañía minera Industrias Peñoles. A 300 metros de profundidad, en la mina de Naica, se toparon con una cueva llena de cristales gigantes, conocida hoy como La Cueva de los Cristales. Este hallazgo, en la localidad de Naica, en el municipio de Saucillo, Chihuahua, reveló una maravilla geológica sin igual.

Gigantes de Cristal.

La cámara principal de la cueva alberga algunos de los cristales de selenita (yeso, CaSO4·2 H2O) más grandes jamás encontrados. El cristal más impresionante hasta la fecha mide 12 metros de largo, 4 metros de diámetro y pesa 55 toneladas. Estos cristales han crecido en un entorno único, con temperaturas que alcanzan los 58 °C y una humedad relativa del 90-99 %, lo que hace que la cueva sea extremadamente caliente y desafiante para explorar.

Un Entorno Hostil y Misterioso.

Explorar la Cueva de los Cristales no es una tarea fácil. Sin la protección adecuada, los trabajadores solo pueden soportar unos diez minutos de exposición continua debido a las altas temperaturas y la humedad. Estas condiciones extremas han mantenido la cueva relativamente inexplorada, lo que aumenta el misterio y la fascinación en torno a este sitio.

El Proyecto Naica.

Un grupo de científicos conocido como «Proyecto Naica» se ha dedicado a investigar estas cavernas y su formación. La mina de Naica se encuentra sobre una falla que está encima de una cámara magmática subterránea, ubicada entre 3 y 5 kilómetros por debajo de la cueva. El magma calentó el agua subterránea saturada con iones de sulfuro (S2−). Cuando el agua superficial oxigenada más fría entró en contacto con esta agua caliente, el oxígeno oxidó los sulfuros en sulfatos, que precipitaron como anhidrita (CaSO4). Con el tiempo, a medida que la temperatura de la cueva descendía, estos cristales de anhidrita se disolvieron y formaron cristales de selenita, creciendo lentamente durante al menos 500.000 años.

Otras Cavernas de Naica.

El descubrimiento de la Cueva de los Cristales no fue el primero en Naica. En 1910, se descubrió la Cueva de las Espadas, ubicada a una profundidad de 120 metros sobre la Cueva de los Cristales. Esta cueva contiene cristales más pequeños, de hasta un metro de largo, y se cree que las temperaturas de transición en esta cueva cayeron más rápidamente, deteniendo el crecimiento de los cristales.

Además de la Cueva de los Cristales, en el año 2000 se descubrieron otras dos cuevas más pequeñas: la Cueva Ojo de Reina y la Cueva de las Velas. En 2009, durante un proyecto de perforación, se encontró otra cámara llamada Palacio de Hielo, a 150 metros de profundidad. Aunque las formaciones de cristales en esta cueva son más pequeñas y de formas variadas, como coliflores y filamentos finos, siguen siendo impresionantes.

El Futuro de la Exploración.

La Cueva de los Cristales sigue siendo un desafío para los exploradores y científicos debido a sus condiciones extremas. Sin embargo, con el avance de la tecnología y la investigación, se espera que se pueda comprender mejor la formación de estos gigantes de cristal y descubrir más sobre los secretos ocultos en las profundidades de la mina de Naica.

Este tesoro geológico en el corazón de Chihuahua no solo es una maravilla de la naturaleza, sino también un recordatorio del poder y la belleza que yace oculto bajo la superficie de la Tierra.

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