Arely P., hermana del hombre que aún se encuentra hospitalizado y cuya madre perdió la vida en el accidente, expresó su frustración ante la indiferencia de las autoridades del ISSSTE.
HISTORIASMX. – A poco más de un mes del fatal accidente ocurrido el pasado 31 de agosto en la carretera Parral-Chihuahua, donde una ambulancia del ISSSTE se volcó, provocando la muerte de seis personas y dejando a una más gravemente herida, las familias de las víctimas han salido a exigir justicia. Estas familias, profundamente afectadas por la tragedia, señalan la falta de responsabilidad de los directivos de la clínica, quienes hasta la fecha no han ofrecido respuestas claras ni han asumido la responsabilidad de lo sucedido.
Arely P., hermana del hombre que aún se encuentra hospitalizado y cuya madre perdió la vida en el accidente, expresó su frustración ante la indiferencia de las autoridades del ISSSTE: «Hace ya más de un mes que a seis familias, incluyendo la mía, nos cambió la vida de manera muy lamentable. Mi mamá y cinco personas perdieron la vida en este terrible accidente, y mi hermano aún sigue hospitalizado.»
Arely detalló que el accidente involucró a tres pacientes y sus dos acompañantes, además del chofer de la unidad, todos fallecidos en el trágico incidente. Sin embargo, los directivos responsables de tomar decisiones erróneas sobre el traslado de los pacientes siguen en sus puestos, sin asumir ninguna responsabilidad.
La familia también denunció las condiciones inadecuadas en las que se realizaban estos traslados. Los pacientes eran transportados en una sola ambulancia, sin un botiquín de primeros auxilios y sin el apoyo de personal médico o de enfermería. Arely explicó que estas circunstancias no eran aisladas, sino que se repetían cada tercer día, ya que los pacientes requerían sesiones de hemodiálisis. «Esta condición la vivió mi madre durante 4 años», recordó.
Pese a las constantes peticiones a las autoridades del ISSSTE para mejorar las condiciones de traslado y brindar un servicio más adecuado, las respuestas fueron siempre negativas. Arely señaló que las ambulancias a menudo se quedaban sin gasolina en plena carretera, carecían de aire acondicionado o calefacción, lo que ponía en peligro a los pacientes, especialmente durante las extremas temperaturas que se registran en la región.
«Las condiciones de las ambulancias eran terribles«, agregó Arely. «Siempre tuvimos una respuesta negativa por parte del director o encargado de dirigir la clínica del ISSSTE en Parral, así como de las autoridades de la delegación del ISSSTE en la capital del estado.»
Finalmente, las familias exigen no solo condolencias, sino respuestas claras y soluciones efectivas. Piden la destitución de los directivos responsables, una evaluación rigurosa de los choferes antes de enviarlos a traslados, y una mejora en la calidad del servicio médico, con el objetivo de evitar que otras familias sufran tragedias similares en el futuro.