El ataque ocurrió el sábado 1 de febrero en la localidad de Dolores, cuando las fuerzas de seguridad realizaban un operativo en la zona, la cual ha sido escenario de incidentes similares en el pasado.
Guadalupe y Calvo, Chihuahua – 1 de febrero de 2025. Un convoy de la Célula de Bases de Operaciones Interinstitucional (BOI) fue emboscado con explosivos en el municipio de Guadalupe y Calvo, Chihuahua, resultando en varios elementos heridos, incluido el comandante de la 42 Zona Militar, Jorge Alejandro Gutiérrez Martínez.
El ataque y sus consecuencias
El ataque ocurrió el sábado 1 de febrero en la localidad de Dolores, cuando las fuerzas de seguridad realizaban un operativo en la zona, la cual ha sido escenario de incidentes similares en el pasado. Sujetos desconocidos detonaron artefactos explosivos desde el aire contra el convoy de seguridad, causando heridas a varios elementos y daños materiales a un vehículo militar y una camioneta de la Fiscalía General del Estado (FGE).
Los elementos heridos fueron trasladados de emergencia al estado de Sinaloa para recibir atención médica. Horas más tarde, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) confirmó que entre los lesionados se encontraba el general de Brigada Diplomado de Estado Mayor (DEM) Jorge Alejandro Gutiérrez Martínez. No obstante, su estado de salud fue reportado como estable, ya que las heridas sufridas fueron superficiales y no pusieron en riesgo su vida.
Otros heridos en la emboscada fueron Aida Roxana “N”, adscrita a la Agencia Estatal de Investigación (AEI), así como los militares Eliseo Carlos “N” y Humberto “N”, cuyo estado de salud se mantiene bajo reserva.
Antecedentes de violencia en la región
Guadalupe y Calvo es un municipio del sur de Chihuahua que desde 2020 ha sido escenario de una disputa territorial entre las organizaciones criminales de Los Salgueiro —afiliados al Cártel de Sinaloa— y La Línea —brazo armado del Cártel de Juárez—. La violencia en la región ha generado desplazamientos forzados de familias enteras debido a la constante amenaza de los enfrentamientos.
El pasado 31 de diciembre de 2024, integrantes de la BOI de Guadalupe y Calvo fueron atacados con explosivos en circunstancias similares mientras escoltaban a tres familias que abandonaban la zona debido a la inseguridad. Aunque en esa ocasión el primer artefacto detonado no causó daños, más adelante el convoy fue atacado con cinco explosivos adicionales, dañando vehículos de la Agencia Estatal de Investigación y de la Secretaría de Seguridad Pública estatal.
Reacción de las autoridades
En respuesta a la emboscada del 1 de febrero, diversas corporaciones estatales y federales coordinaron un despliegue táctico en la región con el objetivo de identificar y capturar a los responsables. La Sedena, en conjunto con la Guardia Nacional y fuerzas estatales, mantiene operativos de vigilancia y patrullaje en la zona para evitar nuevos ataques y restablecer la seguridad.
Las autoridades han reiterado su compromiso de continuar con las labores de combate al crimen organizado en esta región de Chihuahua, considerada estratégica para el trasiego de drogas y la operación de grupos delictivos.
Conclusión
El ataque con explosivos contra la BOI en Guadalupe y Calvo evidencia la creciente peligrosidad de la zona y el uso de tácticas sofisticadas por parte de los grupos criminales. Mientras las fuerzas de seguridad continúan sus operativos en la región, la población local sigue enfrentando el impacto de la violencia que ha marcado este municipio en los últimos años.