Tenía una superficie sembrada de marihuana, de 90 hectáreas, con un estimado de 3 millones 600 mil matas de cannabis.
HISTORIASMX. – En el árido paisaje de Jiménez, Chihuahua, donde el marrón del suelo se encuentra con el azul del cielo, una mancha verde desató una de las operaciones antidrogas más grandes en la historia de México. El 4 de agosto de 1994, un extenso sembradío de marihuana fue descubierto en Los Acebuches, una localidad remota convertida en epicentro de un gigantesco operativo militar y policial. Este hallazgo superó en magnitud al famoso caso de Búfalo, detectado una década antes, propiedad del infame narcotraficante Rafael Caro Quintero.
Los Plantíos de los Acebuches: Un Descubrimiento Monumental.
Localizado a 28.1 kilómetros de la cabecera municipal de Jiménez, el plantío ocupaba 90 hectáreas de lo que parecía ser un cultivo inofensivo de maíz. Sin embargo, tras una inspección aérea por parte de la inteligencia militar y el Servicio Secreto, se reveló la verdadera naturaleza del terreno: 3 millones 600 mil plantas de cannabis estaban meticulosamente ocultas, listas para ser procesadas.
A diferencia del operativo en Búfalo, donde se incineraron 8 mil toneladas de marihuana, el de los Acebuches no capturó la atención mediática que merecía.
No obstante, la magnitud del descubrimiento fue impresionante: 300 efectivos de diferentes cuerpos de seguridad participaron en la destrucción de un cultivo que, de haber llegado a los mercados, hubiera tenido un impacto considerable en la dinámica del narcotráfico en la región.
Vida en el Plantío.
El sitio no solo albergaba plantas de marihuana, sino que estaba equipado para sustentar la vida de quienes laboraban en él. Se encontraron 84 camas, electrodomésticos, alimentos para un mes y hasta un sistema improvisado de electricidad, lo que evidencia la escala y el nivel de organización detrás de este enclave del narcotráfico.
Detenciones y Repercusiones.
En el operativo, fueron arrestados varios trabajadores, todos jóvenes locales de entre 18 y 35 años, quienes declararon desconocer la identidad del propietario del terreno.
Sus historias personales reflejan una triste realidad: la de los habitantes de regiones empobrecidas, a menudo atrapados en el engranaje del narcotráfico sin opciones claras de empleo alternativo.
Contexto Histórico y Actual.
La detención de Rafael Caro Quintero en julio de 2022 reavivó el interés en los plantíos históricos como los de Búfalo y los Acebuches, recordando los impactos a largo plazo de estas operaciones en las comunidades locales.
Según testimonios de residentes de la época, como el señor D.D., estas actividades no solo generaron un movimiento económico significativo en la región sino que también establecieron una cultura de producción y tráfico de marihuana que persiste de diversas formas hasta el día de hoy.
El caso de los Acebuches, aunque menos conocido que otros, representa una pieza clave en el entendimiento del narcotráfico en México. Mientras que la lucha contra las drogas continúa evolucionando, las historias de estos plantíos nos recuerdan la complejidad y profundidad de un problema que es tanto social como legal, impregnado en la tierra y en la vida de la gente de Jiménez.
Por: Gorki Rodríguez.