La falta de lluvias y una temporada de ciclones poco activa agravan la crisis hídrica en el estado. Especialistas instan a implementar medidas urgentes para mitigar los efectos.
HISTORIASMX. – Desde 2023, Chihuahua ha enfrentado una de las sequías más severas en Norteamérica. Los niveles críticos de agua en embalses clave, como la presa La Boquilla, reflejan la gravedad de la situación. Tras el cierre de la temporada de ciclones 2024, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) anunció que la sequía en el norte y noroeste del país persistirá al menos hasta mayo de 2025, dejando al estado en una crisis hídrica prolongada.
Una temporada de ciclones desigual
De acuerdo con el meteorólogo Fabián Vázquez, la escasa actividad ciclónica en el Océano Pacífico durante 2024 contribuyó a la falta de lluvias en Chihuahua y otras regiones áridas de México. Mientras estados como Nuevo León y Tamaulipas se beneficiaron de precipitaciones que mitigaron la sequía, Chihuahua y el noroeste del país no tuvieron la misma suerte.
El impacto del estiaje
Vázquez explicó que el estiaje, periodo de mínimas precipitaciones y bajos niveles en los cuerpos de agua, se extenderá hasta mayo de 2025, agravando la situación. Aunque el estiaje no es sinónimo de sequía, en el caso de Chihuahua representa una ausencia de lluvias significativas que podrían aliviar los efectos de esta devastadora crisis.
La agricultura, la ganadería y el abastecimiento de agua potable se encuentran entre las actividades más afectadas, subrayando la necesidad de adoptar medidas inmediatas para gestionar el uso del recurso hídrico.
Sequía en cifras
La temporada de ciclones 2024 permitió mitigar la sequía en México en un 30%, pero Chihuahua sigue siendo una de las zonas prioritarias debido a su vulnerabilidad. Desde 2023, el estado ha registrado niveles de precipitación considerablemente bajos, lo que lo posiciona como una de las regiones más afectadas por la sequía en toda Norteamérica.
Llamado a la acción
Especialistas y autoridades instan a implementar medidas de uso eficiente del agua, como:
- Promoción de la agricultura sostenible.
- Revisión de políticas de distribución y almacenamiento de agua.
- Campañas de concientización para reducir el consumo.
Asimismo, se destaca la importancia de desarrollar estrategias de adaptación que permitan a las comunidades rurales y urbanas enfrentar los desafíos que plantea esta crisis climática.
El desafío climático en Chihuahua
Con un panorama sin esperanzas de lluvias significativas en los próximos cinco meses, Chihuahua enfrenta un reto crucial para mitigar el impacto de la sequía en su población y economía. La colaboración entre gobierno, expertos y ciudadanía será esencial para superar esta crisis y garantizar la sostenibilidad del recurso hídrico en el estado.